Artículo de Rafael Gómez publicado el 29 de marzo.
A algunos del PP se les ha ido la boca y ya han largado algunos aspectos sobre el verdadero programa electoral del PP, el que están dispuestos a imponer al conjunto de españoles y españolas si ganan las elecciones.
Por un lado el copago: Si quieres un servicio sanitario digno, has de pagar un tanto por ciento de los costes del servicio prestado, a parte de los impuestos que ya paga el ciudadano por el mismo concepto. Como siempre con el copago sanitario los que más tienen, menos pierden o más ganan
Y digo yo: Si es un problema presupuestario, ¿porque no se eliminan otras partidas presupuestarias arcaicas e innecesarias como la financiación de la iglesia y la monarquía? QUE NO NOS ENGAÑEN, la sanidad y la educación son competencias totalmente transferidas a las Comunidades Autónomas, y las gobernadas por el PP son las peores gestionadas, las que peor servicio dan y las que pretenden que el ciudadano pague más por menos.
En Catalunya, no está el PP, pero gobierna una derecha encabezada por el President Artur Mas, ese del Palau de la Música, que de momento no insiste en el copago, pero que va a reducir 1000 millones el presupuesto de sanidad, para hacer frente al déficit. 1000 millones que por otra parte va a perdonar a los más ricos de Cataluña con la supresión del impuesto de sucesiones, vaya incongruencia ¿no?, para un gestor público tal vez, para un servidor de las clases pudientes y de los intereses de los que más tienen una política totalmente consecuente.
A los catalanes y catalanas nos van a cerrar el 20 de junio y el 30 de septiembre nueve de sus 16 plantas asistenciales en el Hospital de Bellvitge, a este cierre se sumaran otros en Vall d'Hebron, Sant Pau, Can Ruti de Badalona o Joan XXIII de Tarragona.
El recorte va afectar a las plantillas de urgencias ya de por si diezmadas, al despido del personal laboral, nada menos que 5.000 empleados sanitarios y a la congelación salarial de los empleados públicos de la sanidad. Las listas de espera se alargan en 6 meses y los diagnósticos de prevención se reducen un 40%.
Esto es lo que hace CIU y Artur Más. Nos rebaja la calidad y los servicios sanitarios, pero elimina los impuestos a los más ricos o inyecta cientos de millones de € a empresas como Spanair
Cuanto más empeore la sanidad pública más motivos para favorecer a la privada. Es la obsesión de esta casta política que nos gobierna CIU, servidora de sí misma y de los poderes fácticos, enemiga de lo público, recelosa de la democracia y de la transparencia, partidaria ciega de una "economía saneada" a costa del presente y del futuro de aquellos a quien dicen representar. "La pela es la pela". “nuestras pelas son sus pelas”.


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